Qué hacer si sufres una violación o una agresión sexual

¿Has sufrido una agresión sexual o una violación y no sabes qué hacer? En este artículo te explico lo que debes hacer si sufres una agresión sexual o una violación.

Qué hacer si sufres una violación en Madrid
Qué hacer si sufres una violación en Madrid

Somos abogados expertos en delitos de carácter sexual

Llama para consultar tu caso

LA PRIMERA CONSULTA ES GRATUITA

☏ 916 64 64 38


Qué hacer si sufres una agresión sexual

Después de una agresión sexual, no es raro que te sientas confusa o molesta. Puede que incluso te sientas enfadada o asustada. Puede que no sepas cómo reaccionar. Todo esto y más puede ocurrir tras una agresión sexual.

En esta guía vamos a intentar responder algunas de las preguntas que se plantea alguien que acaba de sufrir una agresión sexual en España.

Qué deberías hacer si sufres una agresión sexual o una violación en España

Si sufres algún tipo de agresión sexual, posiblemente entres en shock y estés asustada y no sepas lo que debes hacer.

Aquí tienes una serie de consejos sobre lo que deberías hacer si sufres una agresión sexual o una violación en España:

Dirígete a un lugar seguro

Suponiendo que te acaben de violar, lo primero que debes hacer es buscar un lugar seguro donde refugiarte. Dependiendo de donde te encuentres, deberías de ir a casa de un amigo o pedir ayuda a una persona para que te lleve o que te acompañe al hospital.

Si te sientes amenazada justo en ese momento, deberías llamar inmediatamente al 112. Lo más importante es que te preocupes por tu seguridad y que te alejes del peligro lo antes posible.

No te laves ni te toques

La mayoría de las mujeres que han sufrido una agresión sexual o que han sido violadas tienen tendencia a lavarse o ducharse inmediatamente.

Pero esto es una equivocación, y deberías esperar antes de limpiar tu cuerpo de cualqueir resto de ADN de la persona que te ha violado. Es mejor dejar todo como está, ni siquiera te cepilles los dientes ni te cepilles el pelo o te peines hasta que te haya examinado un médico y la policía haya podido tomar muestras de tu cuerpo con el ADN del agresor.

Tampoco deberías beber, comer, fumar o tomar ningún tipo de medicamento. Incluso aunque no quieres denunciar la agresión; es importante que no alteres o elimines cualquier prueba de la agresión, sobre todo porque quizás más tarde cambies de opinión y decidas poner la denuncia por violación en comisaría.

Si quieres saber cómo poner una denuncia, en este artículo te explicamos cómo poner una denuncia.

Ve al médico lo antes posible

Es comprensible que lo último que quieres si has sufrido una agresión sexual o te han violado es que alguien te toque, que te pinchen con algo para tomar muestras o que alguien introduzca algo en tus partes íntimas, pero es importante que un profesional médico cualificado se ocupe, tanto de tu salud como de tu seguridad, lo antes posible.

Los médicos y enfermeras que atienden en las urgencias de los hospitales a mujeres que han sufrido una violación son profesionales muy cualificados que saben cómo actuar con cuidado y con suavidad, porque saben perfectamente lo que has sufrido.

Además de recoger pruebas, los médicos y enfermeras te van a hacer pruebas de enfermedades de transmisión sexual, por si el agresor te hubiera contagiado alguna.

También te van a proporcionar medicación preventiva por si el agresor estuviera contagiado de SIDA y así prevenir que contraigas la enfermedad.

También te pueden suministrar algún medicamento anticonceptivo para evitar que te quedes embarazada del agresor.

Decide si quieres poner una denuncia

Aunque lo que ha ocurrido es un delito muy grave, no tienes obligación de poner una denuncia si no quieres, es una decisión que te corresponde sólo a ti.

Sin embargo, algunas víctimas de agresiones sexuales dicen que denunciar los hechos les ayuda a recuperar el control de sus vidas.

Si quieres saber cómo poner una denuncia, puedes leer este artículo de nuestro blog sobre cómo poner una denuncia.

Qué ocurre si pones una denuncia

Si decides denunciar la agresión en comisaría, si quieres, puedes ir acompañada de una amiga, un familiar o tu abogado para que te apoye emocionalmente.

Para poner la denuncia debes acudir a la comisaría o cuartel de la Guardia Civil más cercano

Allí un agente (posiblemente una mujer) te va a preguntar qué ha ocurrido. Dile todo lo que recuerdes, deja que sea el agente el que que decida si es relevante para la investigación.

Es probable que el agente te haga algunas preguntas. Responde lo mejor que sepas, siempre con honestidad. Si no sabes algo o no lo recuerdas, díselo sin miedo, no te lo inventes.

La policía comenzará la investigación inmediatamente, partiendo de la información que les has facilitado.

Si sabes quién es la persona que te ha agredido, la policía irá a su casa a detenerlo inmediatamente y lo traerán a comisaría para tomarle declaración.

Es muy probable que le tomen una muestra de ADN para compararlo con las muestras extraídas de tu ropa o con cualquier resto de semen extraido del interior de tu cuerpo.

Si no conoces a la persona que te ha agredido, la policía lo buscará e intentará encontrarlo. Facilita a la policía cualquier detalle que ayude a identificar a esta persona.

La policía acudirá al lugar donde tuvieron lugar los hechos y buscarán posibles testigos de la agresión. También pueden recoger pruebas, por ejemplo, grabaciones procedentes de cámaras cercanas, que ayuden a identificar al agresor.

La policía contactará de vez en cuando contigo para informarte de cómo progresa la investigación o para pedirte información adicional.

Si la policía cree que ha identificado a un culpable lo pondrán a disposición del juez de instrucción para que decida si hay pruebas suficientes para juzgarlo por violación.

Puede que te llamen para una rueda de reconocimiento, donde tendrás que identificar al agresor entre una serie de personas. No te preocupes, porque tú le puedes ver, pero él no te puede ver a ti.

Escribe un relato de los hechos

Redactar en un cuaderno un relato de los hechos puede ayudar a la policía a determinar si se ha producido un delito de índole sexual, y a determinar de qué tipo de delito se trata.

Además, escribir los hechos cuando aún los tienes recientes te ayudará a no olvidar ningún detalle el día del juicio. Ten en cuenta que pueden pasar meses desde la agresión hasta el día que tengas que declarar en el juicio.

Busca un buen abogado

Quizás deberías también consultar con un abogado. Pero no acudas a cualquier abogado, ni al primero que te encuentres, ni siquiera a un abogado conocido o a un familiar que ha estudiado derecho.

Deberías contactar con un abogado penalista que tenga experiencia en casos de agresión sexual

Busca apoyo psicológico

Una agresión sexual es un golpe muy duro que te puede afectar emocionalmente, por lo que casi todas las víctimas de violación buscan ayuda psicológica para superar el trauma.

Hablar con alguien sobre la agresión puede ayudarte a superar la ansiedad y te permite decidir lo que quieres hacer de forma más sosegada.

A veces, hablar con una amiga o un familiar puede servir de consuelo, pero la mejor opción es acudir a un profesional para recibir terapia psicológica.

También hay grupos de apoyo a mujeres agredidas sexualmente. Participar en alguno de estos grupos se ha demostrado de gran ayuda para la mayoría de las víctimas de una violación.

En qué consiste un examen médico

Si has sufrido una agresión sexual, deberías hacerte un examen médico. La decisión, en última instancia, es tuya, pero un examen médico puede ser un requisito imprescindible para poder reunir pruebas y perseguir al culpable de la agresión sexual.

El examen incluye una exploración pélvica que incluye:

  • Tomar muestras de ADN de tu vagina y ano
  • Tomar muestras de debajo de las uñas
  • Sacar una muestra de sangre
  • Recoger una muestra de orina

El examen lo debe hacer un facultativo cualificado en una clínica o en un hospital. Si quieres, puedes ir acompañada de un familiar o una amiga de confianza.

Todas las muestras tomadas durante este examen forense se pueden utilizar en el procedimiento penal contra la persona o persona que te ha violado.

El examen debería realizarse dentro de las primeras 72 horas tras la violación, de modo que las pruebas estén recientes y no hayan desaparecido o se hayan contaminado.

Si acabas de sufrir una violación, lo normal es llamar al teléfono de emergencias 112 para que envíen a la policía. La policía te va a llevar a un centro médico cualificado para realizar el examen forense con todas las garantías legales, de modo que las pruebas se puedan utilizar en el juicio contra el agresor.

El daño físico en una violación

Una violación provoca un daño físico en el cuerpo de la víctima. El médico es la persona responsable de hacer un examen completo, que incluye detectar signos externos, como moratones, o internos, como desgarros.

Además, el médico puede recomendar las siguientes pruebas médicas:

Análisis de drogas

El objetivo de un análisis de drogas es determinar si el agresor te suministró alguna sustancia antes de la agresión.

Algunas drogas pueden impedir que pienses con claridad, por lo que cualquier consentimiento a tener relaciones durante sus efectos estaría viciado y no sería legalmente válido.

Los test de drogas más utilizados son un análisis de sangre y un análisis de orina. Para obtener unos resultados fiables, las analíticas deben realizarse cuanto antes.

Análisis de enfermedades de transmisión sexual

A través del análisis de sangre o de una muestra de la mucosa de la vagina se puede detectar si el agresor te ha contagiado alguna enfermedad de transmisión sexual o ETS.

Algunas ETS pueden tardar un tiempo en manifestarse. Algunas tardan incluso semanas, por lo que tendrás que volver a realizarte análisis periódicos durante un tiempo.

Hay ciertas medicinas que previenen la aparición de algunas ETS en el caso de que el agresor te haya contagiado. La mayoría de estas medicinas son eficaces si las tomas durante las 72 horas posteriores a la agresión.

Test de embarazo

A través de un análisis de sangre o de orina se puede detectar si te has quedado embarazada a causa de la agresión.

Es necesario confirmar el embarazo con un nuevo test que se administra el día después de una falta en el ciclo menstrual.

Qué deberías evitar si acabas de sufrir una violación

Si acabas de sufrir una violación deberías evitar los siguiente:

  • Ir al baño
  • Ducharte o bañarte
  • Lavarte el pelo
  • Cambiarte de ropa
  • Cepillarte el pelo

Cómo encontrar un buen terapeuta para superar una violación

Esto es lo que deberías buscar en un terapeuta, por ejemplo, un psicólogo, para que te ayude a superar una violación o una agresión sexual:

Experiencia

Busca alguien que esté acostumbrado a ayudar a personas que han sufrido una agresión sexual.

Agradable

Busca a alguien que te resulte agradable, honesto y con quien te sientas a gusto para contarle los detalles más íntimos de la experiencia traumática que has vivido.

Si no te sientes a gusto con tu psicólogo, no vas a compartir con él o ella cómo te sientes o lo que piensas.

Puede que tengas que probar con varios terapeutas antes de encontrar el más adecuado para ti.

Práctica

Diferentes psicólogos y terapeutas tienen diferentes maneras de tratar los problemas psicológicos de la gente.

Busca la terapia que mejor se adecue a tu caso o con la que te sientas más a gusto.

Quizás tengas que probar diferentes terapias antes de decidir cuál es la que más te conviene en tu caso.

Los problemas tras sufrir una violación

Una violación o una agresión sexual es una experiencia traumática que te deja confusa, vulnerable, avergonzada y sola. Sin embargo, sorprendentemente, ocurre con más frecuencia de lo que la gente piensa.

De hecho, una de cada cinco mujeres han experimentado algún tipo de violencia sexual a lo largo de su vida, normalmente por alguien de su entorno en quien confiaban.

Las agresiones sexuales no sólo afectan a las mujeres. Los hombres y, especialmente los niños, también sufren algún tipo de violencia sexual.

Independientemente del género o de la edad, una agresión sexual o una violación te hace sentir insegura y vulnerable. Como resultado, las personas que han sufrido una agresión sexual se vuelven desconfiadas y tienen problemas para relacionarse y confiar en los demás.

A veces, estas personas también dudan de si han hecho lo correcto, ponen en duda su propia valía y, a veces, incluso dudan de si no estarán perdiendo la cordura.

Las personas violadas o agredidas sexualmente sienten que las relaciones sexuales no son seguras. También sienten que nunca más van a poder tener relaciones íntimas. A veces, también creen las mentiras que alguien difunde sobre ellas y se culpan por lo que ha ocurrido, hasta el punto de que muchas mujeres que han sido violadas se odian por lo que ha ocurrido, ya que se responsabilizan por la violación.

Si has sido violada o te han agredido sexualmente, es importante recordar que lo que sientes, lo que piensas y lo que estás experimentando es tan sólo una reacción natural al trauma que has vivido.

No importa lo difícil que resulte y lo dura que sea la vida en estos momentos, no desesperes porque hay esperanza de mejorar con ayuda de profesionales y con esfuerzo por tu parte.

Con el tiempo te volverás a sentir segura y aprenderás a confiar en los demás. Más importante aún, lograrás superar el trauma y podrás seguir con tu vida normal.

Cómo recuperarse de una violación

Una víctima de una violación o una agresión sexual puede sufrir una depresión, tentación de suicidio, síndrome postraumático, problemas de alimentación como anorexia o bulimia, abuso de sustancias como el alcohol o las drogas e incluso tendencia a auto-lesionarse.

Pero todos estos problemas se pueden superar con ayuda y tratamiento psicológico. No basta sólo con la ayuda de tu familia y tus amigos, deberías contactar con un profesional especializado en ayudar a mujeres que han sufrido una agresión sexual.

También es útil unirse a grupos de ayuda a mujeres víctimas de una agresión sexual. Busca aquello que mejor funcione en tu caso.

Recupera el control de tu vida

Para superar el trauma que supone una agresión sexual deberías recuperar el control de tu vida y practicar hábitos saludables, como comer comida sana, hacer ejercicio y dormir lo suficiente.

Si no puedes dormir por culpa de las pesadillas, visita a tu médico para que te den algo que, temporalmente, te ayude a dormir y que te ayude a superar las pesadillas.

No sólo necesitas cuidar tu cuerpo, también necesitas cuidar tu mente. Hay víctimas que encuentran que practicar meditación o incluso escribir un diario les calma y les ayuda a superar el trauma de la violación.

No te metas en casa y haz un esfuerzo por recuperar tu vida social. Sal con amigas y haz aquello que siempre te ha gustado, ya sea viajar, ir a actividades culturales o ir a comer a un buen restaurante.

Antes de ir a ver una película, es una buena idea consultar antes de qué va la trama, porque puede que ciertas escenas te hagan recordar la agresión, algo que no es deseable.

Acude a terapia

Muchas víctimas de una agresión sexual encuentran que la terapia con un psicólogo y los grupos de apoyo les ayudan a recuperarse de una violación.

Tanto la terapia como los grupos de apoyo a las víctimas de una violación son espacios neutrales donde nadie te va a juzgar y donde puedes hablar sin miedo sobre tu experiencia, tus emociones, tus miedos y cualquier otra cosa que estés experimentando a causa de la agresión sexual.

La terapia psicológica también te ayuda a superar la depresión que normalmente acompaña a las víctimas de una violación, y también te ayuda a superar cualquier tentación de suicidarte.

Un buen psicólogo clínico con experiencia en víctimas de agresiones sexuales puede ayudarte a superar estos problemas o cualquier otro consecuencia de la violación.

A la hora de seleccionar el profesional es muy importante que preguntes si tienen experiencia tratando a víctimas de una agresión sexual o una violación.

No te quedes con el primer psicólogo que encuentres, visita a varios hasta que encuentres el que mejor se adecua con tu forma de ser y con el que te sientas más a gusto.

Para que la terapia sea efectiva, es importante que te sientas a gusto con el terapeuta, porque tienes que ser totalmente honesta con él o ella y hablarle de todo lo que sientes y sobre tus miedos y traumas.

Un último consejo para las víctimas de una agresión sexual o una violación

No importa cuál sea la ruta que tomes para recuperarte de un evento tan traumático como es una agresión sexual o una violación, es importante que recuerdes que lo que te ha ocurrido en ningún caso es culpa tuya.

No deberías culparte porque nada que hayas podido hacer justifica que alguien te viole o que te agreda sexualmente. La culpa de lo ocurrido es enteramente de la persona que tomó la decisión consciente de agredirte.

Más importante aún, hay personas que han sido formadas para ayudarte y a las que puedes acudir. Asegúrate de que acudes a estos profesionales.

Recuperarse de una violación es algo que requiere la ayuda de terceros, no es algo que puedas hacer tú sola. Con paciencia y constancia puedes llegar a superarlo y seguir con tu vida.