Echar a un okupa rápido de tu casa

¿Quieres saber cómo echar a un okupa rápido de tu casa? En este artículo te explico cómo echar a un okupa rápido de tu casa.

vivienda okupada en España
Vivienda okupada en España

El problema de la okupación de viviendas en España

La okupación ilegal de viviendas es un problema creciente en España. Cada vez hay más viviendas okupadas. También hay mafias que se encargan de encontrar casas vacías para okupar.

La solución legal a la okupación de viviendas en España

La okupación de viviendas es un delito en España. Si en la vivienda hay alguien viviendo de forma habitual, el okupa comete un delito de allanamiento de morada, que se castiga con pena de prisión de hasta dos años.

Pero si en la vivienda no hay nadie viviendo en estos momentos, el okupa comete un delito leve de usurpación, que se castiga tan sólo con una multa.

La recuperación de una vivienda okupada

Una vez dentro de la vivienda, el okupa declara que se trata de su vivienda habitual. Como el domicilio es inviolable según la Constitución española, nadie puede entrar en la vivienda sin una orden judicial, ni el propietario de la misma ni la policía, salvo que haya pruebas de que se está cometiendo un delito dentro de la vivienda, como puede ser la venta de drogas.

Recuperar por vía judicial una vivienda okupada no es tarea fácil en España. Por desgracia, los okupas conocen todas las tretas legales para retrasar el proceso de desahucio lo máximo posible.

Cuando un propietario denuncia la okupación de una vivienda, a continuación se presenta la policía o la Guardia Civil para investigar y hacer un atestado.

Normalmente los okupas muestran a la policía un contrato de alquiler falso o alegan que llevan ya un tiempo residiendo en la vivienda, con el fin de demostrar que se trata de su domicilio habitual.

La policía entrega el atestado en el juzgado y el funcionario busca una fecha para el juicio, donde se pedirá a los okupas que demuestren que residen legalmente en la vivienda. Según la ley, el juicio debería tener lugar antes de seis meses, pero como la justicia está colapsada en España, esto raramente se cumple y el juicio se puede demorar hasta un año.

Tras el juicio, el juez suele decretar el desalojo de la vivienda. Si los okupas no se van por las buenas, que es lo normal, entonces el juez tiene que decretar el lanzamiento por parte de una comisión judicial acompañada de la policía, por si acaso los okupas oponen resistencia y se atrincheran en la vivienda.

Por desgracia, todo este proceso puede demorar hasta dos años, suponiendo que el abogado del propietario sea diligente y que el funcionario del juzgado no entierre el expediente en un cajón durante meses.

Las empresas de desokupación

A causa de la lentitud de la justicia, muchos propietarios que han visto sus viviendas okupadas acuden a alguna empresa de desokupación, como el caso de Bastión, una empresa de Madrid.

La empresa de desokupación primero inicia un proceso de mediación entre el propietario de la vivienda y los okupas, donde se busca el desalojo voluntario de la vivienda, normalmente, a cambio de alguna compensación de tipo monetario (dinero).

Si la mediación no da resultado, entonces la empresa recurre a medidas más drásticas para recuperar la vivienda, por ejemplo, el control de accesos, lo que se conoce como un proceso de desokupación express.

Al poner un control en la entrada de la finca, se impide el paso a toda persona que no muestre un título legal que le permita el acceso al interior. Para que sea legal, el control de acceso lo debe hacer un vigilante jurado.

Es decir, que una vez que el okupa sale de la vivienda para comprar o para llevar al colegio a los niños, ya no puede regresar a la misma debido al control de acceso.

Cuando la vivienda se queda vacía de okupas, la empresa de desokupación se encarga de cambiar la cerradura y de contratar una alarma para que los okupas no puedan volver a okupar la vivienda.